Este tipo de ejercicios, suelen ser una cutrez y no terminar de encajar. Sin embargo, por lo que sea, en este caso funciona y lo hace estupendamente. No se si es que son un grupo de directo, que apareció en mi vida en el momento adecuado, que los arreglos son excelentes, o que la emocionalidad que destila lo impregna todo. El caso es que es el único disco de Vetusta al que nunca he dejado de volver, una y otra vez. Aun hoy, estando ya muy lejos de sus coordenadas.