No es ningún secreto que la escena independiente española post-covid atraviesa un escenario bastante confuso que ya se alarga: bandas con un enfoque festivalero desfasado, colaboraciones inverosímiles, cambios de registro aleatorios, despedidas, lanzamientos de usar y tirar, chistes que perdieron la gracia desde que empezaron a tenerla...
Y en mitad de todo este escenario loco, aparecen Ramper y te plantan un álbum de 10 minutos por canción. Y se quedan tan anchos: con todo su toto.
Pero no contentos con eso, se atreven a tomarse su movida en serio, a escribir canciones con inteligencia pero sin pretenciosidad, a explorar los caminos del folclorismo mezclados con el shoegaze más puro, a obligarte a que seas tu quien haga el esfuerzo de… More