A pesar de que el disco, me ha resultado un poco decepcionante, cuenta con una de las mejores canciones que he escuchado en todo este año: Caricia.
Todo un cañonazo de ocho minutos de ruido, distorsión y mucho The Breeders, directo y sin tapujos. Una verdadera maravilla al nivel de cosas tan rotundas como Bull Believer o White Ceiling.
Una lastima que, a diferencia de los otros, en Tormentas Malsanas, el resultado sea un poco desequilibrado. Aun asi, como he comentado en mi reseña (que puede ser leida aqui) tienen todo mi interese y pienso seguirlas de cerca, porque prometen ser muy tremendas.