Lo he vuelto a escuchar a raíz de la publicación de su último disco y me queda la misma sensación de siempre: un álbum con algunas canciones buenísimas rodeadas de otras tantas muy olvidables.
Uno de mis discos favoritos de lo que llevamos de año. Suena como si los Flaming Lips del American Head hubiesen decidido grabar una continuación en la granja de Dolly Parton.